16 de Noviembre de 2017
Las compañías vuelven al mercado a pesar de la incertidumbre política
Ian Mount, Financial Times
Juan Velayos, Consejero Delegado de Neinor Homes tenía motivos para estar nervioso antes del road show previo a la salida a bolsa que la promotora protagonizó en marzo.
La economía doméstica no era un problema. Los inversores institucionales, provenientes sobre todo de Reino Unido y Francia, entendieron la recuperación económica. “Teníamos un entorno macro muy favorable”, dice Velayos, “con el PIB creciendo con más fuerza que en el resto de países europeos y el desempleo descendiendo, mientras las hipotecas y el poder adquisitivo mejoraban debido a la caída de precios.”
Aun así, España todavía tenía unas 480.000 viviendas de obra nueva sin vender, y el número de transacciones de viviendas acababa de estabilizarse después de una década de descensos. Peor aún, los inversores habían perdido la confianza en los promotores españoles después del estallido de la burbuja en 2008.
Velayos les estaba proponiendo que invirtieran en la primera OPV de una promotora en diez años y en la mayor salida a bolsa de una promotora en Europa.
El optimismo sobre la recuperación de la economía española finalmente se impuso y la OPV de Neinor Homes tuvo una demanda que superó más de cuatro veces la oferta. El precio de salida fue de 16,46 euros por acción, otorgándole a Neinor Homes una capitalización bursátil de 1.300 millones de euros. En cuatro meses, el precio llegó a los 20 euros por acción, antes de caer ligeramente por encima del precio de salida.
La bolsa española tuvo un buen comienzo de año, con el IBEX 35 subiendo un 19% hasta mayo. Esto motivó a muchas compañías españolas a saltar al parqué, protagonizando algunas de las mayores salidas s bolsa de Europa en 2017 – además de Neinor Homes, hubo otras salidas a bolsa como la de Gestamp en abril, que salió con una valoración de 3.200 millones de euros.
De hecho, las compañías españolas han captado en los mercados 29.000 millones de euros en lo que va de año, un incremento del 53% con respecto al año pasado, según BME, el operador de bolsa. De esa cantidad, 21 compañías han levantado 4.300 millones en salidas a bolsa, tres veces la cantidad del mismo periodo de 2016, año en el que el país estuvo sin gobierno durante diez meses. El mercado español ha sido el más activo en OPVs por volumen, según BME.
“No es que 2016 fuera un mal año, si no que este año ha sido especialmente bueno”, asegura Domingo García Coto, responsable de research de BME.
La economía española muestra un buen comportamiento. El PIB ha sido uno de los que más ha crecido en la eurozona durante los últimos años y creció un 3.1% anualizado durante el tercer trimestre. Además, el desempleo ha caído al 16% desde el 27% en 2013.
Entonces surgió el conflicto entre Madrid y el gobierno de Cataluña, que celebró un referéndum no autorizado el 1 de octubre. “Después de un 2016 marcado por la incertidumbre, 2017 ofrecía un entorno político más estable y unos datos macroeconómicos que garantizaban la recuperación”, dice Victoria Torre, analista jefe de Self Bank en Madrid. “Así era antes del conflicto catalán”.
Las reservas en el sector turístico catalán han descendido y más de 2.000 compañías han trasladado su sede a otras partes de España.
El IBEX 35 cayó un 11% desde máximos en mayo y mínimos en octubre. Y el Banco de España estima que la incertidumbre política podría recortar el PIB nacional hasta un 2.5% acumulado durante los próximos dos años.
Este es, según el mercado, otro ejemplo de por qué la bolsa española suele cotizar con descuento con respecto a otras plazas.
“España nunca ha dejado de ofrecer excusas a inversores extranjeros para no prestar atención a los fundamentales”, comenta José Ramón Iturriaga, gestor de Abante.
“La más reciente es Cataluña. Un año antes teníamos un gobierno en funciones y el año anterior la principal preocupación era Pablo Iglesias”.
Pero hay motivos para creer que el daño a los mercados españoles será limitado. Victor Peiro, responsable de research del banco de inversión Beka Finance, apunta que las compañías del IBEX 35 sólo ganan en Epaña en torno a un tercio del beneficio antes de impuestos.
El impacto podría verse disminuido por el hecho de que el gobierno central de Mariano Rajoy actuara rápidamente para disolver el Gobierno de Cataluña y convocara elecciones regionales en diciembre.
“La proximidad de las elecciones del 21 de diciembre ofrecen la ventaja de que, para bien o para mal, la incertidumbre no durará mucho”, asegura Victoria Torre. “Esto despeja el escenario de larga espera, que habría generado mayor desconfianza por parte de inversores institucionales”
Para aquellas compañías que esperan salir a bolsa en los próximos meses, la reciente experiencia de Aedas Homes podría darles confianza – o un motivo de espera.
La promotora llevó a cabo su salida a bolsa con éxito a mediados de octubre, semanas antes del referéndum catalán, pero sus acciones cayeron en la apertura y continúan por debajo del precio de salida.
“El hecho de que fueran capaces de salir a bolsa en un momento de máxima incertidumbre demuestra la fortaleza del mercado y la confianza de los inversores”, asegura Velayos. A los inversores les encanta España, el entorno macroeconómico, y el negocio.”
“Aún así, con Cataluña, les estás haciendo pensar en algo inexplicable”.
Fuente: Financial Times. Artículo traducido del inglés por la Compañía